“PARA TRAER VERDADERA PAZ A LA TIERRA”
Con el fin de traer verdadera paz a la tierra, ¿cuáles son las cosas que podemos hacer ahora? Es tener una amplia visión del mundo y trascender el ego individual. Cuando las personas están atrapadas en la estrecha perspectiva del ego, comienzan a sentir una distancia de los demás a causa de las diferencias. Ese el comienzo de los conflictos y guerras. Sin embargo, el mundo donde existimos, es infinitamente vasto y consiste en una red de varias vidas. Esa red de la armonía se basa en la estructura fractal donde todo existe para el individuo y el individuo existe para el conjunto.
La verdad de este mundo es que todo es UNO. Por lo tanto, no hay ningún límite entre todo lo demás y nosotros. Si se amplía la cosmovisión de las personas en esta materia, la paz prevalecerá naturalmente en la tierra sin que nosotros estemos tratando de crear un mundo pacífico.
Hay un carácter en japonés “Hataraku”. Esto significa “trabajo”. Sin embargo, el verdadero significado es “hacer que los demás (Hata) estén cómodos (Raku).” Trabajar significa en un sentido vivir, por lo que la vida juega un rol en la red más allá de nosotros y contribuye con los demás y el mundo. Por lo tanto, vivir es traer la paz al mundo.
Sin embargo, las Naciones dan prioridad a los beneficios nacionales y los individuos priorizan sus propios beneficios, por lo que la paz no puede mantenerse desde grandes guerras a nivel nacional hasta pequeños conflictos a nivel individual. La causa es una estrecha visión humana del mundo. Las guerras y los conflictos surgen de la mente humana que prioriza el ego.
Mirando la historia de la evolución de los seres vivos en la Tierra, seis grandes extinciones se produjeron en los últimos 600 millones de años. Según las estadísticas, se dice que existe la posibilidad de otra extinción de seres vivos en un futuro próximo. Son los seres humanos quienes tienen la mayor capacidad y mayor influencia de todos los seres que habitan en la tierra desde el pasado hasta el presente. Los seres humanos, de pie en la cima de los seres vivos de la Tierra, tienen una posibilidad de traer la siguiente extinción estando fuera de control o de traer un mundo avanzado, superando la crisis de extinción.
Hemos entrado al siglo XXI y enfrentado algunos grandes puntos de inflexión. El sol orbita la Galaxia Vía Láctea cada 226 000,000 años y espirales alrededor de 9000 veces en el intervalo. Una espiral tarda 25,800 años. Tuvimos el solsticio de invierno de la galaxia de 25.800 años el 21 de diciembre de 2012 y cambiamos de los tiempos de oscuridad y conflicto a los tiempos de luz y armonía. Por otra parte, Plutón orbita el sol cada 248 años. Plutón hizo un circuito en el 2008 y la civilización material del Oeste que continuó por 250 años desde la Revolución Industrial llegó a su fin. Y ahora los tiempos comienzan cuando la civilización espiritual oriental florece.
Ya hemos entrado en la etapa en que cada persona este consciente de la verdad desde el punto de vista universal. Por lo tanto, muchas personas han comenzado a cuestionar los valores tradicionales y se requieren los valores de una Nueva Era. La revolución espiritual de cada persona cambia el país y el mundo. Cambiando usted mismo es el inicio para cambiar al mundo. Esa es la voluntad universal y la expresión del ciclo de los tiempos. Por lo tanto, todos los eventos que ocurren en el nivel individual, nacional y mundial se dan también en el universal y en el flujo de los tiempos. La perspectiva necesaria para leer los tiempos de esa manera es posible liberándonos de nuestros egos individuales y tener una visión amplia del mundo. Aunque los seres humanos están en un recipiente físico pequeño del cuerpo, somos capaces de llegar a un nivel de conciencia donde todo el universo somos nosotros mismos, en última instancia.
Los seres humanos van a llegar a ese nivel de conciencia en el siglo XXI. Los próximos 1.000 años es un período de transición que va del tiempo de perseguir riquezas materiales a los tiempos para aprovechar las capacidades ocultas en nuestro interior. Es el 90% del cerebro humano que aún no se ha utilizado, es responsable de eso. Si la capacidad de explotar que esta durmiendo dentro de nosotros florece, la intuición para sentir la voluntad universal y el flujo de los tiempos funcionarán y nos permitirán entender el universo sin salir de la tierra. La posibilidad de la tecnología para explorar el universo se expandirá grandemente allí. Somos capaces de evolucionar con la alta espiritualidad además de la moderna tecnología y riqueza material como aquellos que viven en una nueva era.
El siglo XXI es el principio de los tiempos en que los seres humanos tendrán consciencia como un ser de la tierra y como un ser universal y contribuir con este mundo. Ahora, estamos ante el punto de inflexión en el que ya sea que activemos la próxima extinción de seres vivos de la tierra o que vayamos a crear una nueva era”.
Cuando los seres humanos expresan la espiritualidad indica que en la próxima era la paz prevalecerá en la Tierra.